Este animal simboliza el regocijo de la vida, así como la habilidad de ser fuerte ante cualquier adversidad inesperada. Es un mensajero de vida capaz de viajar grandes distancias. Aquellos con este animal de poder son invitados a disfrutar de la vida plenamente sin dejar de ser flexibles en su camino.
En este ejercicio empleamos las técnicas de iluminación de letras de la época medieval. Utilicé mi animal de poder junto con la letra L para llevar a cabo este proceso.
El boceto principal consta de la letra L dando soporte a dos flores de maga. Una tercera flor sale de la parte de atrás de la letra y una enredadera cubre toda la L. Un colibrí está posado en la enredadera y un segundo colibrí está alimentándose de la flor de maga en la parte superior. Luego se preparó un papel pergamino para plasmar en él la versión final del ejercicio.
Luego se utilizaron pinturas de acuarela y acrílico para darle color.
Se utilizaron colores como el rojo, el verde, el amarillo y el azul para darle vida a éste trabajo. Luego de la primera mano, se mejoraron los tonos y se escribió un mensaje que completara la narrativa.
Esta imagen narra como la vida puede tener entre sus líneas diferentes paisajes. Es decir, muchas veces nos quedamos en la enredadera preguntándonos "¿que será?" o "¿cómo lo haré?" cuando más arriba hay una oportunidad de crecer y seguir nuestro camino. No es hasta que nos llega esa iluminación que salimos a alimentarnos, que salimos a conocer, a caminar. La luz que nos llega del cielo nos obliga a mirar hacia arriba, a movernos en búsqueda de oportunidades que nos sirva de molde para nuestras vidas. La luz que nos hace sentir vivos.
